Hoy me gustaría iniciar esta entrada preguntándome ¿Donde están nuestras batallas? Esas en las cuales identificamos nuestro Día a Día, esas que nos inspiran a la lucha, y que orientan nuestra la mirada, manteniéndola inmóvil, concentrada al 100% en un horizonte, ese al que apuntamos con todo el poder de la ilusión y de los sueños despiertos. Pueden formar parte de un ideal y tornarse nuestro mayor objetivo.
Cualquiera de nuestras batallas puede convertirse en la gran aventura, la mas grande experiencia de nuestro paso por este mundo.
Nuestras batallas, nuestros ideales nos obligan a veces a enfrentarnos a situaciones complicadas y terrenos donde plantarnos supone el hecho de afrontar sensaciones un tanto amargas, difíciles de asimilar y muy duras de roer, batallar por lo que soñamos a veces se traduce en perdidas, pero en ello radica la esencia de nuestras metas y nuestra libertad ¿Cuanta tribulación somos capaces de soportar? ¿Hasta donde llega nuestra mirada cuando la sentimos dañada por la arena de la incertidumbre? ¿Hasta que punto mantenemos viva nuestra esperanza y la confianza en los que hacemos? ¿En que momento de la marcha comienza a hacernos daño el peso de nuestros miedos? ¿Hasta donde llega el estimulo con el que nos embriaga nuestra zona de confort? ¿En que punto decidimos hacernos conservadores? ¿Es mejor pájaro en mano que cien volando?
A veces la falta de recursos y medios ponen el palo en la rueda de nuestros sueños, así es entonces que, para continuar la marcha, tenemos que echar mano a toda la imaginación que nos sea posible buscando la inspiración y centrando en la creatividad aquello por lo que batallamos. Claro que duelen los golpes, desde luego que cada batalla individual es única y a veces invisible ante los ojos de los demás, pero es inevitable si queremos llegar al horizonte que nos dispusimos. Esta en nosotros lucharla y salir victoriosos en la medida que podamos, pero ante todo esta la tarea de aprender. Que cada batalla sea un libro que nos permita crecer y afinar nuestra persona, porque en nuestra vida siempre tendremos que estar preparados ya que no somos conocedores de aquello que sobrevendrá, ni dueños del futuro que estamos esperando, esta en nuestra capacidad de lucha creativa el hecho de recibir el mañana tomando nuevas formas y reinventandonos para que asi suceda.
Las batallas en la vida de cada persona están a la orden del día y en medio de ella nuestros temores, nuestras dudas, nuestros miedos, pero también nuestra capacidad de superarlos, poniendo ganas, ilusión, sentido de la responsabilidad y sobre todo, mucho amor en cada paso que damos.
Comencé la entrada con una pregunta y quiero terminarla con la frase de una persona que acaba de partir de este mundo y en la cual encontré muchas respuestas e inspiración.
Nelson Mandela.
Ahora en mi memoria Madiba, hasta siempre amigo!!!
Javier ámara.
