Para el prevenido no existe el ocaso reza un proverbio chino y vaya si es cierto. Es muy normal que a veces, desde la inmediatez en la que vivimos sumergidos, pensemos que si algo de la casa se rompe o se estropea ya lo volveremos a comprar o la próxima semana llamaremos al técnico y asunto arreglado, pero muchas veces esta manera de razonar nacida de esa inmediatez a la que hice referencia es la que mayores problemas nos trae.
Supongamos que no se trata simplemente de un grifo, que tal si, por cosas que tiene la vida nuestro hogar sufre un incendio o cualquier desastre de características similares.
Un grifo mal cerrado,
un escape de gas o dejarse la plancha encendida. Multitud de despistes
pueden convertirse en un problema gravísimos si estamos hablando de
nuestra casa. Tu casa es tu castillo. Un lugar donde protegerte del
mundo.
Hoy reflexionaremos sobre el Seguro de nuestro Hogar, una cobertura que ronda los 250/300 euros anuales, pero que bien nos sacara las patatas del fuego en el momento que mas lo necesitemos.
Con las viviendas no ocurre lo mismo que con los coches. Tener asegurada nuestra casa no es obligatorio pero si muy recomendable. Habitar una vivienda no exige tener contratado un seguro que cubra ni la estructura ni el interior, pero es aconsejable estar cubierto ante la posibilidad,
ya no de que tengamos un problema en casa, sino de que le ocasionemos
un perjuicio a nuestro vecino. Ante cualquier eventualidad que suframos o
que causemos, tendríamos que correr con los gastos.
Entrando de lleno en el tema, veamos que tipo de mínimos es lo recomendable para que nuestra casa este segura.
Lo más habitual es un seguro multirriesgo o combinado que
proteja de los daños más comunes que puedan llegar a afectar a los
bienes del asegurado, tanto en lo respecta al continente como al
contenido, y que responda ante la responsabilidad civil. Los riesgos
clásicos que suelen cubrirse y recomendarse son incendios, fenómenos
atmosféricos, averías producidas por el agua, rotura de cristales y
robo. Otras coberturas habituales son la cerrajería urgente, la
asistencia de hogar, el servicio jurídico, daños por animales
domésticos, etc. El precio medio anual de un seguro de este tipo en España rondaría los 250-300 euros.
Limites del seguro contratado.
Todos los conceptos susceptibles de ser asegurados suelen estar marcados
con un límite, que será más alto en función de la prima. Un seguro
estándar de hogar incluye una garantía de responsabilidad civil hasta un límite que se mueve alrededor de los 250.000-300.000 euros.
En este caso, se pondrían en marcha todos los seguros correspondientes,
tanto el de la vivienda donde se ha originado el siniestro, como el del
resto de inmuebles y el de la comunidad. Tendrían que ser las
aseguradoras las que se pusieran de acuerdo para llevar a buen trámite
las reclamaciones por daños. Habría que analizar de dónde proviene el fallo, ya que no es lo mismo que provenga de la instalación eléctrica general o que haya sido intencionado.
Cuales son los daños que cubre nuestro seguro y hasta donde llega.
Todo depende del catálogo de coberturas que se haya contratado. Cuando
se acude a una aseguradora, hay que leer con detalle lo que incluyen las
diferentes modalidades de seguro que se ofrecen, y en caso de tener un
siniestro, recurrir a las condiciones generales y específicas
contratadas para consultar el caso en particular. La mayoría de los
seguros se hacen cargo de los daños directos,
así que si entre éstos hay muebles, responderán por ellos hasta la
cantidad límite fijada en la póliza. Efectivamente se tiene en cuenta la
depreciación, por eso el seguro manda a un perito para evaluar la situación
y examinar los daños. Para esta clase de indemnizaciones, no hay nada
mejor que contar con las facturas del mobiliario, y si no es posible,
disponer de un presupuesto.
Mucha gente se pregunta si las Compañías Aseguradores obligan a sus clientes a contratar determinado Profesional.
Lo más aconsejable es llamar al seguro primero y exponerles la situación
para que la valoren y decidan si el caso está dentro de las coberturas
contratadas o no. El perito, tras realizar un análisis de los datos,
puede proponer las dos opciones. Una de las cláusulas más comunes de las
pólizas es el compromiso de enviar a nuestra casa un profesional en un corto espacio de tiempo si se trata de algo urgente. Estamos en nuestro derecho de acudir a un fontanero o a un pintor por nuestra cuenta,
pagar sus honorarios y pasar la factura después a nuestro seguro para
que se haga cargo de reembolsárnosla. En estos casos, las compañías suelen pedir un informe detallado de
la causa del problema y del coste de la misma cuando no se trata del
equipo habitual que trabaja para ellos, pero los profesionales están muy
acostumbrados a este tipo de documentación.
El sector de los Seguros de Hogar es bastante grande en España, hay una variada lista de compañías con las que podéis contar, si actualmente vuestra vivienda esta al descubierto sin seguro alguno. Los casos mas normales por los que una vivienda esta sin su seguro es por motivos económicos, aun así, existen diversas modalidades de pago que facilitan la contratación.
Ciertamente, tener un hogar asegurado no es obligatorio, pero vaya que si es recomendable.